Mete en una licuadora: 2 tazas de caricaturas, 3 cucharadas soperas de música estridente, 1/2 kilo de tatuajes crudos, 1 onza de street art, 1 docena de cómics sin cáscara, una pizca de toque vintage. Lo mezclas y en un vaso sin colar obtendrás un potente jugo de VIEJOS RUFIANES, una pandilla que llenara de sus ilustraciones lo que se le ponga en frente.